¿Qué factores pueden causar el mal rendimiento de un deportista?
Se ha hablado de la mala gestión del Instituto Peruano del Deporte (IPD), de la escasa difusión de los medios y la falta de apoyo de la población hacia las federaciones nacionales. Sin embargo, volvamos hablar de los verdaderos protagonistas: los deportistas.
Sin lugar a dudas el país pierde mucho al no apoyar a estas promesas del deporte, pero ¿qué pierden los deportistas? En primera instancia se piensa en el dinero, ya que gastan sus propios recursos en sus entrenamientos y otros artículos necesarios para estos; pero, en esta sección queremos enfocarnos en lo psicológico.
La preparación psicológica es tan importante como la preparación física, debido a que se basa en aquellas respuestas o comportamientos que un deportista debe saber para afrontar circunstancias de ansiedad, tristeza, miedo y demás. La tensión que normalmente sienten, saber que no hay un apoyo realista sumado a un gasto de tiempo y esfuerzo para resultados poco favorables, hacen que el deportista entre en un ambiente lleno de estrés y presión, lo cual les genera temor al no cumplir las expectativas de familiares, público y entrenadores, creando así un bajo rendimiento como una baja autoestima.
Nuestro país se ha caracterizado por ser potencia en algunas disciplinas deportivas, sin embargo, las facilidades y el apoyo por parte de las autoridades encargadas de velar por el deportista peruano son mínimas y a veces no llegan a recibir nada. Existe el caso de que los deportistas toman la decisión de no continuar, retirándose de las competencias y olvidándose de obtener medallas, campeonatos, títulos y otros reconocimientos.
Cabe mencionar que todas las federaciones reciben un aporte anual para la inversión administrativa de la disciplina y gastos de los propios representantes, ya sean deportistas, comando técnico, auxiliares, viáticos y entre diversos factores para afrontar un torneo o campeonato en representación del país.
Cuando se realizaron los Juegos de Lima 2019, muchos deportistas mostraron su molestia con sus propias federaciones, ya que no habían recibido el apoyo correspondiente, es decir, entrenaban por su propia cuenta, lo cual no era recomendado por el nivel de competencia, y gastaban de su propio dinero para movilizarse que, en su mayoría, no era rentable debido a que ellos se deben o dedican netamente al deporte.
Un caso en particular muy reciente fue del boxeador José María Lúcar, quien participó en los Juegos Olímpicos Tokio 2020. Él realizó una crítica mediante una publicación en sus redes sociales, con un video sobre la falta de apoyo que reciben los deportistas locales por parte de las entidades correspondientes y, a su vez, respondió a quienes piden medallas, pero no conocen las difíciles condiciones en las que entrenan. “Se acabó la moda de los Juegos Olímpicos y volvemos. ¿Quieres medallas para Paris 2024? Yo también quiero. Conocemos a los rivales, ¿Cuál es la diferencia acá? Ellos vuelven, entrenan en su centro de alto rendimiento, tienen un séquito de entrenadores, médicos, fisioterapeutas, nutricionistas, psicólogo, todo, ¿y el atleta peruano? Al gimnasio, al gimnasio de la calle”, mencionó Lúcar.
Si realmente queremos ser protagonistas y reconocidos en el deporte a nivel mundial, debemos primero apoyar y brindarles todo lo necesario a nuestros deportistas nacionales, para que se puedan preparar correctamente y, de esa manera, participen sin ningún inconveniente, sintiéndose orgullosos de representar al país en los distintos eventos deportivos y no por compromiso. Asimismo, las autoridades tienen que estar presentes desde el inicio hasta cuando consigan un logro importante, lo cual se debe notar en las declaraciones y comportamientos de los propios deportistas con sus federaciones.
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